El ejercicio físico es básico para el aprendizaje y la adaptación general del niño al ambiente en el que se desarrolla. Entre otras razones, porque el ejercicio es un medio para practicar, poner en acción, entrenar, realizar, usar y/o mejorar nuestras actividades. Es más, el ejercicio es una parte natural de la vida, por lo que deberíamos incluirlo conscientemente en nuestra rutina diaria.
El aprendizaje, el pensamiento, la creatividad y la inteligencia no son procesos propios del pensamiento únicamente, sino de todo el cuerpo. Ayudar a que cuerpo y mente se alíen en beneficio del rendimiento intelectual puede resultar una tarea muy positiva, además de sencilla. La psicomotricidad se entiende como una práctica que favorece el desarrollo global de la persona a través del cuerpo y de su movimiento libre y espontáneo en sus interacciones físicas, simbólicas y cognitivas con el medio. | |||||||||||||||||
La práctica psicomotriz está pensada para que el niño sienta el placer
de actuar y llegue al placer de pensar y de pensar más allá de la
acción; actualmente predominan dos modelos de intervención: la
psicomotricidad dirigida (basada en un enfoque más tradicional que pone
énfasis en el desarrollo global de la persona, así como en los aspectos
motores y cognitivos) y la vivenciada (centrada en la actividad motriz
espontánea). Desconocido, La psicomotricidad en el desarrollo infantil, s.f. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario